20MINUTOS.ES
- Las máquinas llegan a nuestra vida: robots contra la delincuencia, de reparto... Pero, ¿funcionan realmente?
- Algunas personas están a favor de dar la bienvenida a la tecnología del futuro mientras otras la combaten.
La presencia de máquinas en nuestro día a día cada vez es mayor y está llegando a puntos que rozan la ciencia ficción. Estados Unidos es el país pionero en incorporar a sus calles diferentes tipos de robots, aunque no todos los acogen con alegría. Los que más controversia están causando son los robots anti homeless de San Francisco que ya han sido víctimas del vandalismo ciudadano.
La ONG de la ciudad SF SPCA (dedicada a la defensa animal y a la adopción de mascotas) promovió el uso de estos aparatos para ahuyentar a las personas sin hogar de los alrededores de su sede en 2017.
La organización tomó la decisión de poner en funcionamiento estos robots al considerar que sus empleados a veces no eran capaces de cruzar "con seguridad" las aceras a causa de los campamentos que montaban los sintecho, tal y como contó el The San Francisco Business Times. Además, afirman que desde que están en marcha los robots la cantidad de homeless de la zona ha disminuido.
Here it is in action pic.twitter.com/nSBQUmKwk1
— Sam Dodge (@samueldodge) 9 de diciembre de 2017
La máquina utilizada para esta misión se llama K9 y forma parte de una flota de robots fabricados para combatir la delincuencia. Tiene forma de huevo y está compuesta por láseres, cámaras, sensores térmicos y GPS que detectan actividades delictivas y alertan a las autoridades.
https://t.co/rz1AaosRo3 so @sfspca is using a security robot to “deal with” #homeless people in encampments near its mission campus? An org that helps homeless animals can’t think of a better way to respond to its homeless human neighbors?
— Red Riv (@riv_red) 9 de diciembre de 2017
Esta medida ha provocado una división en la ciudad de San Francisco, ya que no todos los ciudadanos ven moralmente correcto implementar este tipo de tecnologías.
Además, se suma el hecho de que se trata de una ONG que protege a los animales la que ha llevado a cabo esta iniciativa, una decepción para muchos al ver cómo tratan a personas sin hogar. Otros están contentos con la medida ya que se ha reducido el crimen en la zona.
Los robots han sufrido las consecuencias de esta división: uno de ellos fue cubierto con una lona por los sintecho, tumbado y cubierto de salsa barbacoa en las zonas donde tienen sensores. Otra de estas máquinas fue golpeada por un hombre borracho, y otro, quizás consciente del peligro que corría, acabó "suicidándose" tirándose a una fuente.
Our D.C. office building got a security robot. It drowned itself.
— Bilal Farooqui (@bilalfarooqui) 17 de julio de 2017
We were promised flying cars, instead we got suicidal robots. pic.twitter.com/rGLTAWZMjn
Ante esta oleada de vandalismo, el Ayuntamiento de San Francisco ordenó al SF SPCA sacar esos robots de las calles, amenazándoles de recibir multas de 1.000 dólares si seguían operando sin el correspondiente permiso.
Robots de reparto
Dallas aprobó el pasado mes de octubre un programa piloto que enviará una tropa de robots a repartir diferentes productos por la ciudad. Las máquinas están fabricadas en San Francisco y utilizan sensores de luz para detectar los objetos de su entorno.
El programa limita a las empresas participantes en el proyecto a tener un máximo de 20 robots y está asociado a servicios de entrega de alimentos y otros mercados minoristas. Está por ver si realmente son capaces de cruzar las carreteras y pasar pos calles estrechas.
También están en pleno funcionamiento los robots de reparto en Westwood, destinados a llevar alimentos a los estudiantes del campus universitario. Son del tamaño de una impresora y es un servicio mucho más barato que un servicio de entrega normal.
El servicio lleva dos años funcionando y cuenta con 100 robots. Sin embargo, parece ser que más que apreciar esta nueva tecnología, los estudiantes se divierten golpeándolos e intentando hacerlos volar por los aires, hecho que dificulta el correcto servicio de reparto. También arremeten contra estos robots los sintecho de la zona, a los que se ha visto intentando robarlos, según cuenta el Daily Bruin.
Está claro que no todo el mundo acepta la llegada de los robots a su día a día y se aferra al presente (o incluso al pasado) posicionándose contra las nuevas tecnologías. Puede que no estemos todavía preparados para la inclusión de ciertos servicios con máquinas.
Fuente: Tecnología https://ift.tt/2yZtfLH
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