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- Con mayor o menor dificultad, todos estos aparatos son potencialmente 'hackeables'.
- Si un atacante accede a una red doméstica, puede hacerse con el control de la información.
Los asistentes de voz son uno de los gadgets de moda. El de Amazon, el de Google, el de Movistar... estos asistentes han sido uno de los superventas de la campaña de regalos de las pasadas navidades. Ocurre que para que la experiencia sea completa, es imprescindible mantenerlos conectados con otros dispositivos que haya en la casa. Los enchufes inteligentes son una de las mejores formas de conseguirlo.
Pero cuidado, que estamos hablando de redes, de datos y por lo tanto de seguridad. Como recuerda Panda Security, un enchufe inteligente es un aparato más que se conecta a través de la señal Wi-Fi, con lo que, si se consigue vulnerar su seguridad, potencialmente se puede acceder a toda la red de la casa. Es decir, que no todos estos enchufes son seguros y hay que tener en cuenta varias funcionalidades antes de comprarlos.
Hay dos tipos de enchufes inteligentes. Aquellos en los que hay que abrir un puerto en el router de la casa y los que se conectan por medio de una app móvil o algún entorno cerrado. Los primeros son los realmente peligrosos, ya que si se deja abierto un puerto de conexión, para un hacker puede ser realmente fácil acceder a toda la red, ordenadores y móviles incluidos.
Si un atacante accede a una red doméstica, puede hacerse con el control de la información que fluye por ella, desde las cuentas de las plataformas que hay conectadas, como Netflix, HBO o Spotify, o incluso podría modificar el funcionamiento de lo que hay conectado al enchufe.
Un ejemplo: si ese enchufe controla un radiador que se conecta a diario antes de que su dueño llegue a casa para que esté caldeada, el hacker tendría un abanico de posibilidades inabarcable. Desde hacer que su víctima tenga encendida la estufa todo el día, con lo que el gasto eléctrico subiría drásticamente, hasta generar un incendio.
Pero, explican en Panda, todos estos aparatos funcionan con un sistema operativo que es más fácil o más difícil de atacar, pero todos son potencialmente hackeables. Es importante leer las especificaciones técnicas de estos dispositivos antes de comprarlas. Y, por supuesto, si la app con la que manejar el enchufe no aparece en las tiendas oficiales, lo recomendable es no comprarlo bajo ningún concepto.
Muchas de estas apps están creadas para además de controlar el enchufe desde el móvil, se deje una puerta de atrás abierta para que los hackers puedan acceder a la red o incluso a la información que hay almacenada en el móvil.
Fuente: www.20minutos.es/ IFTTT